Seamos sinceras, si te pudieras quedar allí jugando con él,
¿verdad que no derramaría ni una sola lágrima?.
Porque en realidad, a casi
todos los niños les gusta la guardería, lo que no soportan es separarse de sus
padres.
Guárdate unos días de vacaciones, la adaptación será mucho
mejor si tu hijo te tiene cerca. Le acompañarás por la mañana y lo recibirás
cuando salga, podrás hablar más relajadamente con la maestra, llevarlo a comer
a casa si conviene, o consolarlo cuando te necesite.
Compra con el los materiales que va a necesitar para su
escuela o guardería déjalo que esté lleno de ilusión.
• Prepáralo para ser un ser autónomo
Es bueno que los cambios en los hábitos se inicien en casa y
no dejar la iniciativa a la escuela. Empieza tú a darle la comida aplastada sin
triturar, por ejemplo. O, si ya tiene dos años, enséñale qué es un orinal para
que juegue con él. De esta manera, aceptará mejor los nuevos hábitos en la
guardería.
Que la guardería o escuela forme parte de sus paisajes
habituales, como lo son el parque o la nevería.
Que vea que ustedes están contentos y confiados ante la
nueva situación.
Una despedida cariñosa pero corta, que no complique la
separación.
Av. Larco cuadra doce segundo piso "Guardería Querubín"
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